miércoles, 7 de noviembre de 2018

UNOS CLÁSICOS: EL DINERO, LA CORRUPCIÓN Y D. QUIJOTE

Dos cosillas (por decir algo):

1/. Una de bancos: Si alguien tenía dudas sobre la posición de la Justicia en este país, creo que se acabará de caer del caballo, como San Pablo, pero en vez de quedar ciego como aquel, supongo que ahora tendrá una visión mucho más clara del asunto. Los milagros posteriores a la caída, la conversión y otras zarandajas, las dejo en la inopia de la fe. Y no sigo para no destapar (más) la tragedia.

Y 2/. Cospedal, con su sonrisa de excelsa cariátide, se pone de perfil a la espera de que pase el torbellino de corrupción que la azota (todo pasa, ya se sabe). Su actitud demuestra otra vez que la realidad supera la ficción más estrambótica de peli de espías tras el telón de acero. Aquí, lo único que es de acero es el rostro de la ahora diputada (que no, no se va+) mirando con ojos de bisturí a quien se atreve a preguntarle por tramas tan oscuras (antes grabadas, ahora escuchadas) que me río yo de James Bond y la KGB juntos y revueltos como en gazpacho manchego.
Pero aquí no pasa nada. Como siempre, todo se hizo para bien del partido y, por supuesto, de ¡España! y si hubo que recurrir a un monstruo de mil cabezas llamado Villarejo, pues se le contrata tras tintadas lunas de cochazo oficial y se le paga luego con dinero también tintado (de azul ultramar casi negro), pues la razón de la sinrazón que a mi razón se  hace, de tal manera mi razón enflaquece, que con razón me quejo de vuestra fermosura... (*)
Pero me vuelvo a perder en las curvas y las transversales. Y, claro, para sacar una verdad en limpio menester son muchas pruebas y repruebas, aunque me temo yo que en esta comedia de disparates nada se sacará en limpio por mucho abrillantador que se emplee o por mucha maña que se aplique a la inspección sanitaria de desatasque de cloaca. 
Pero llaneza, muchacho, no te encumbres, que toda afectación es mala, no nos vengamos arriba y no nos creamos adalides de verdades, cuando todo es disparate, corrupción y ocultamiento y poco puede aclarar nuestro pobre faro en tan espesa niebla, que más parece mostillo cortado con cuchillo jamonero  que sotil vapor de agua. 
Mas no nos paremos en niñerías, ni siquiera en llevar las cosas tan por el cabo, que no se halle. ¿No se representan por ahí casi de ordinario mil comedias llenas de mil impropiedades y disparates, y, con todo eso, corren felicísimamente su carrera y se escuchan no solo con aplauso, sino con admiración y todo?
Porque ¡ay! ahora acabo de creer lo que otras muchas veces he creído: que estos encantadores que me persiguen no hacen sino ponerme las figuras como ellas son delante de los ojos, y luego me las mudan y truecan en las que ellos quieren.
Así, después de esta cita que esclarece, ilumina y guía, no me queda sino seguir mi canto llano y no meterme en contrapuntos, que se suelen quebrar de sotiles.
Pues sí.


Nota bene: las cursivas son de D. Miguel de Cervantes: El Ingenioso Hidalgo D. Quijote de La Mancha. Segunda parte, Capítulo XXVI. Excepto las señaladas (*) que pertenecen al Capítulo I de la primera parte.

+ Horas después de este escrito la señora Cospedal dimitió de su escaño en el Congreso.
Para la historia ha dejado una frase: "Siempre he creído que un partido que no es capaz de defender a los suyos cuando están siendo injustamente atacados no puede esperar que los ciudadanos confíen en él"
No sé... a mí suena a amenaza.

2 comentarios:

  1. ¡Qué gusto leer la bonita letra!
    Me alegra la proximidad al ingenioso en textos y hechos.
    ¡Que siga lo bueno!

    ResponderEliminar
  2. Como siempre....hablando clarito enhorabuena!!!

    ResponderEliminar