"Los españoles tienen que estar muy agradecidos al PP". Rafael Catalá (ministro de Justicia en funciones) dixit; qué digo dixit: afirmo que afirma. Y se queda tan pancho desde esa media sonrisa característica de la gente que dice las cosas sin creérselas. Pero es lo que toca decir, a ver si cuela.
Es de bien nacido ser agradecido, Sr. Catalá, así que le voy a agradecer a usted y a su partido lo bien que lo han hecho y lo están haciendo. Sólo algunos apuntes muy rápidos:
-Gracias por haber aumentado la diferencia entre las clases sociales y haber elevado el nivel de pobreza a niveles más que preocupantes.
-Gracias por haber implantado unas leyes que han recortado derechos sociales, libertades de manifestación y ayudas a los desfavorecidos.
-Gracias por haber propiciado el éxodo de miles de jóvenes (y no tan jóvenes) con un eufemismo de viaje turístico, para que se puedan buscar algún trabajillo por esos mundos repletos de Erasmus.
-Gracias por haber cortado de raíz tantos proyectos y haber dejado la investigación científica en la más completa desolación.
-Gracias por dejar las arcas de la Seguridad Social temblando de miedo.
-Gracias por incumplir unas promesas que no tenían la más mínima intención de cumplir.
-Gracias por aumentar las listas de espera de pacientes impacientes.
-Gracias por elevar a la enésima potencia la corrupción y hacer de ésta su corralito particular donde poder florecer en la basura.
-Gracias por creerse los únicos salvadores de la patria madre (o de la madre patria) y por creerse los únicos españoles auténticos, de pura raza cañí pata negra.
-Gracias por crear tantos puestos de trabajo basura que ni son trabajo, ni son puestos, ni son ná.
-Gracias por apoyar sin fisuras a la patronal (creadora ella de riqueza), menospreciando, cuando no ignorando, derechos de trabajadores largamente perseguidos que tanto sacrificio costaron.
-Gracias por elevar las tasas de la Justicia para que no todo el mundo pueda tener un acceso fácil a Ella.
-Gracias por mentirnos sistemáticamente y esconderse tras una fachada de plasma.
-Gracias por sacarnos de una crisis para meternos en otra (Ley de los lodos comunicantes).
-Gracias por mantener a políticos investigados en sus puestos, presuntamente inocentes (todos lo son, claro).
-Gracias por crear tramas de financiación ilegal por encima del bien y del mal.
-Gracias por buscarle a la palabra transparencia nuevas acepciones, algo que, reconozco, tiene mucho de imaginativo (por decirlo suavemente).
Me dejo muchas cuestiones, pero...¡gracias, en fin, por tantas y tantas cosas! De corazón se lo digo, se lo decimos los españolitos todos, señor Catalá, seamos o no votantes de su PPartido.